Abuelo, que soy Nazi

Ya sé que hace mucho que no hablamos, concretamente desde que tomaste las de Villadiego después del Villa de Madrid de la temporada que ganamos el doblete. Ya podías haber esperado un poquito para haber celebrado contigo esos títulos, pero entiendo que tenías ganas de estar con ella.

Pero bueno, a lo que voy, que resulta ahora que soy Nazi y un asesino. Yo, que ni he estado en Polonia en la vida. Entiendo tu sorpresa, porque me he quedado igual: de pasta de boniato. Pero si lo dicen la prensa y un montón de retrasados mentales (valga la redundancia) e, incluso, lo desliza el gobierno (valga de nuevo)… pues será .

Pero todavía no te he dicho lo peor. Resulta que tú, toda la vida creyéndote progresista, y resulta que también eres Nazi. Te lo digo bajito porque como se entere tu suegro, el que estuvo en el Maquis varios años, igual te la prepara.

Aunque lo mismo él también lo es, no sé si es necesaria la consaguinidad o se puede contagiar a la familia política, le preguntaré a Juanma Castaño.

¿Qué quién ese ese? Literalmente nadie, te daré el mismo consejo que le daría a Gonzalo Miró: no pierdas el tiempo buscando.

Por lo demás aquí las cosas van regular, no te mentiré. El tío está bastante jodido. No he querido decirle que para seguir siendo del Atleti tiene que tirar a alguien al río, porque no está en condiciones físicas. Tampoco le he dicho que ahora es Nazi, porque creo que le afectaría mucho saber que los 50 años de militancia comunista no cuentan: el carné del Atleti anula el del PCE.

Dile a la abuela que no se preocupe por el tío, que nosotros nos estamos encargando de que no le falte de nada. Bueno, sobre todo tu hijo y tu nuera.

Claro que, a estas alturas, tampoco te sorprenderá que te diga que mi padre también es Nazi. A ver, todos pensábamos que era un poco facha, pero no: Nazi de manual y cronificado.

Siento mucho molestarte para esto, la verdad, pero es mejor saber estas cosas por la familia.

Mira, voy a aprovechar para decirte algunas cosas importantes: Jesús Gil se murió, díselo a las personas que sepultó en los Ángeles de San Rafael, porque me da que él no estará por ahí. Ahora el cotarro lo maneja el hijo, que ha resultado ser igual de turbio o más. Entre él y su cómplice, Cerezo, han tirado el estadio que pagasteis entre los socios y ha hecho uno nuevo a tomar por culo.

Fíjate si tenías calado tú al padre de estos, que decías que no iba a dejar ni las rayas de la camiseta… y no ibas desencaminado: nos han intentado quitar hasta el escudo, pero por ahí no hemos pasado, se ha quedado sólo en un secuestro.

¿Que qué dice la prensa de estas cosas? Pues nada, porque ellos en cosas de Nazis no se meten. Sí abuelo, lo son, con todas las letras.

Firmado: tu nieto Miguel.